La devolución no es sólo un problema logístico para las empresas: también puede resultar caro y dañar las relaciones con los clientes.
Hay múltiples razones por las que los clientes devuelven artículos: pueden haberlo hecho accidentalmente, o por una compra incorrecta; pero a veces hay algo malo en el propio producto. En estos casos, el proceso de devoluciones debe garantizar que se ofrezca el mejor servicio posible, de lo contrario se arriesga perder tanto a los compradores nuevos como a los ya existentes debido al comentarios negativos sobre lo difícil que es gestionar las devoluciones/reemplazos en esa tienda.
Dado que más del 50% de los consumidores afirman que sólo volverían a comprar a una empresa si las devoluciones se gestionaran bien, es importante tomar medidas antes de que esto se convierta en un problema. Dicho esto, aquí hay algunos consejos para crear un proceso de devolución moderno que beneficie tanto a los compradores como al negocio:
- Utiliza un portal de devoluciones: esto facilitará el proceso a los clientes, que podrán hacer un seguimiento de su devolución y encontrar información sobre cómo devolver un artículo.
- Haz que tu política de devoluciones sea sencilla y fácil de entender: los clientes deben poder ver qué productos pueden ser devueltos y de cuánto tiempo disponen para hacerlo.
- Ofrece devoluciones con recolección: a los clientes les encantará la flexibilidad de poder devolver los artículos por el método que prefieran, una recolección a través de tu servicio de mensajería sin la necesidad de salir de casa es lo más cómodo.
Al hacer que la devolución de los artículos sea lo más cómoda posible para los clientes, estás demostrando que su experiencia es importante para ti.